Límites constructivos de placas
Coinciden con las dorsales oceánicas que, como vimos con anterioridad, son zonas donde se produce la salida continuada de magma. Esto significa que las dorsales constituyen los lugares donde se genera nueva litosfera y, por tanto, donde comienza la expansión de los fondos oceánicos. Hay, pues, un intenso volcanismo (de carácter no explosivo) y, en consecuencia, un alto flujo térmico (se libera calor).
Fases en la formación de un borde o límite de placa divergente. En la foto inferior, rift africano, que representa el nacimiento de un océano. |
Según la teoría de la tectónica de placas, al menos en sus primeras versiones –como veremos, las ideas actuales son distintas–, el origen de una dorsal comienza con la fractura de una placa, producida por una corriente de convección ascendente que arrastra material caliente y poco denso. El magma tiende a salir, y empuja a la litosfera suprayacente hasta fracturarla; se origina un sistema de fallas escalonadas que delimitan un rift o fosa tectónica, dando origen a dos nuevas placas que empiezan a crecer, “empujándose” y alejándose una de la otra. Tenemos dos posibilidades:
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Que la fractura ocurra en el interior de un continente, de modo que las dos partes de la litosfera se separen y el magma que procede del interior de la Tierra origine nueva litosfera; en tal caso el material que sale por la dorsal inicialmente se mezcla con la corteza continental y origina un tipo de roca con características intermedias entre las continentales y las oceánicas, el basalto; la corteza recién formada queda fuertemente anclada al continente, por lo que es difícil que se rompa y se hunda. Un ejemplo de dicha situación lo encontramos en el triángulo de Afar en Etiopía. En ocasiones, la divergencia se detiene en esta etapa.
Si la divergencia continúa, el lento crecimiento de la corteza oceánica a ambos lados del rift hace que los bordes continentales se vayan separando y dando paso a nuevas coladas de basalto que equidistan del eje de la dorsal. Posteriormente, las aguas pueden invadir estas zonas originando mares (como el mar Rojo) y océanos (por ejemplo, el Atlántico). Conforme se aleja la litosfera oceánica recién creada del punto de origen se va enfriando y, en consecuencia, la placa se hace más densa (→ ver animación).
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Que la fractura se produzca en un océano, es decir, que afecte a la litosfera oceánica. En este caso se forman dos placas oceánicas, y la acumulación de materiales volcánicos en la dorsal puede llegar a sobresalir del nivel del mar originando islas (por ejemplo, la isla de Christmas en el Pacífico).
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