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1. La reconstrucción del pasado terrestre

James Hutton
«Hutton James portrait Raeburn» de Henry Raeburn. Disponible bajo la licencia Dominio público vía Wikimedia Commons.
 

James Hutton (1726-1797), considerado el fundador de la Geología moderna, desarrolló una teoría de la Tierra en que sentó las bases de la Geología histórica e introdujo el concepto del tiempo profundo en contra de la creencia admitida en la época de que la historia de la Tierra comprendía tan solo algunos miles de años. 

Hutton consideraba que los mismos procesos que podemos observar en la actualidad debieron actuar en tiempos pasados ("el presente es la clave del pasado"; ideas que más adelante se conocerán como actualismo). Puesto que sólo podemos observar el resultado de procesos ocurridos en épocas muy lejanas, este principio nos permite identificar el proceso responsable. Por otra parte, observó la lentitud de procesos como la sedimentación y defendió la idea de una prolongada historia, lo que hemos llamado el tiempo profundo, necesario para que se den esos procesos de enorme lentitud.

Según la teoría de Hutton, se sucederían indefinidamente unas serie de ciclos constituidos por una serie de etapas en que alternarían procesos formadores y destructores de rocas (...─ depósito ─ elevación e inclinación ─ erosión ─ depósito ─...). La Tierra funcionaría como una máquina que se autorreconstruye, en la que la destrucción de rocas pondría en marcha los procesos formadores de las mismas, y viceversa. Y como toda máquina precisa una fuente de energía, Hutton pensó que la suya se alimentaría del calor procedente del interior de la Tierra, lo que le valió, a él y a sus seguidores, el apelativo de plutonistas (Plutón era el dios de los infiernos). Hutton vislumbró –y dio argumentos a favor de– un majestuoso ciclo sin fin en el que el calor interno elevaba continentes desde los océanos a la par que otros eran arrasados y sus restos sepultados en el mar.

Un ciclo según Hutton
Un ciclo completo en la "máquina del mundo" de Hutton.

Poco después de publicar su libro Hutton visitó Siccar Point, en Escocia, donde descubrió lo que más tarde se conocería como una discordancia: una serie de estratos prácticamente horizontales que descansaban sobre otros casi verticales. Ya no le cabía la menor duda de que su máquina del mundo no sólo funcionaba, sino que había dado, al menos, dos vueltas… y seguramente muchas más de las que ya no queda ni rastro, repitiéndose una y otra vez el mismo esquema desde tiempos inmemoriales. Así, Hutton reconocía no encontrar “vestigios de un comienzo, ni perspectivas de un final”.

Discordancia de Siccart Point Interpretación de la discordancia de Siccart Point

La discordancia de Siccar Point y su interpretación como la sucesión de dos ciclos de sedimentación, plegamiento y erosión

Sin embargo, Georges Cuvier, como veremos más adelante en esta Unidad, padre de la Paleontología y de la Anatomía comparada, por muchos recordado como el paladín del movimiento geológico que habría de ser conocido como catastrofismo, restituyó la idea de una historia lineal de la Tierra gracias al estudio de los fósiles.

Los fósiles aparecen contenidos en las rocas sedimentarias (sólo algunas metamórficas de bajo grado pueden contener fósiles, ya que éstos son destruidos durante el metamorfismo) y éstas, como vimos al comienzo de la Unidad 9, se depositan en estratos, cada uno de los cuales representa un período de sedimentación, además de que el estudio de su facies sedimentaria aporta información acerca de las condiciones bajo las que se produjo el depósito. Así, las rocas sedimentarias se convierten en un registro detallado de la historia geológica y la estratigrafía en una herramienta fundamental para su estudio y reconstrucción.

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