2.1.2. Alternacia de generaciones en los helechos
Estas plantas presentan un esporofito más rígido que el de los musgos (es lo que conocemos vulgarmente como helecho) que presenta tejidos conductores, características todas ellas que permiten una mayor adaptación al medio terrestre. Además, sus esporas presentan una cubierta que les hace muy resistentes a condiciones adversas. Pero en su ciclo reproductor todavía es imprescindible el agua para la fecundación, por lo que son plantas propias de lugares húmedos.
En la región inferior de sus hojas o frondes presentan unos órganos amarillentos o pardos conocidos como soros (figura anterior y más fotos) que contienen los esporangios en donde, previa meiosis, se forman las esporas. Éstas son dispersadas por el viento y, si aterrizan en un lugar adecuado a las necesidades de la especie, germinan, dando una planta pequeña de forma acorazonada que suele pasar desapercibida; conocida como protalo, posee unos “pelillos” llamados rizoides que captan los nutrientes del suelo, y constituye el gametofito.
En un mismo gametofito pueden existir solo anteridios (productores de anterozoides), solo arquegonios (con sus oosferas) o ambos órganos reproductores. Los anterozoides se desplazan nadando por el agua que cubre el gametofito hasta las oosferas para fecundarlas. El cigoto formado originará un embrión que terminará su desarrollo formando un nuevo esporofito.
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