2.2. Reproducción vegetativa
Además de la reproducción sexual, las plantas también presentan propagación vegetativa, es decir asexual, sin intervención de gametos para formar nuevos individuos. En muchas especies este tipo de multiplicación predomina sobre la sexual, sobre todo cuando las condiciones ambientales son adversas dificultando la germinación de las semillas.
Esta modalidad es posible gracias a la presencia de los tejidos meristemáticos que existen en algunas zonas de la planta y que, en condiciones adecuadas originan, en primer lugar, nuevas raíces y, posteriormente, el resto de las estructuras típicas de una planta.
Las zonas capaces de originar nuevos individuos varían de unas plantas a otras. Por ejemplo, las hojas de la violeta africana pueden dar lugar a una planta completa; en los geranios es un trozo de tallo con hojas; a veces son estructuras subterráneas, como rizomas, bulbos…
Este tipo de reproducción presenta una serie de ventajas: la rapidez con que pueden obtenerse nuevos ejemplares (por ejemplo, para conseguir lirios a partir de una semilla, se necesitan, a veces, varios años, mientras que los obtenidos a partir de un bulbo florecen, generalmente, en el mismo año) y la obtención de individuos con idénticos genes a los de la planta de la que proceden.
El ser humano se beneficia de estas ventajas para la obtención de determinados especímenes con unas características especiales o para preservar determinados ejemplares. Esencialmente se utilizan tres variantes de propagación vegetativa, que son:
Se realiza a partir de tejidos vegetales cultivados in vitro. Esta técnica permite obtener y propagar masivamente plantas genéticamente homogéneas, mejoradas y libres de parásitos. También se pueden fabricar, por medio de las técnicas de ingeniería genética, semillas con características más favorables y después cultivarlas en el laboratorio para obtener microinjertos. Un ejemplo de utilización de estas técnicas lo encontramos en la obtención de especies de guaje, Leucaena leucocephala, un árbol leguminoso del que se ha logrado un aumento de su producción y un rápido crecimiento en suelos pobres. Además de la propagación, las técnicas de cultivo de tejidos in vitro también permiten la conservación de germoplasmas, gracias al mantenimiento prolongado de cultivos de crecimiento lento y la criopreservación (conservación a muy bajas temperaturas) de tejidos. |
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Micropropagación de un microesqueje de Vitis vinifera (vid) sobre un sustrato de agar. |
En este caso se utilizan distintas partes de las plantas —bulbos, rizomas, estolones, tubérculos, estacas— que conserven la potencialidad de enraizar (porque, por ejemplo, contienen yemas). Del mismo modo, es frecuente que algunas plantas, como las orquídeas, desarrollen sobre ellas “hijuelos” que pueden dar lugar a nuevas plantas.
Estolones de Fragaria ("Pink Panda 08 ies" por Frank Vincentz - Obra propia. Baixo a licenza CC BY-SA 3.0 a través de Wikimedia Commons). |
Consiste en insertar segmentos de una planta, que contengan una o más yemas, sobre tallos de plantas receptivas de la misma especie o de una especie muy cercana, con el fin de que se establezca continuidad en los flujos de savia entre la planta receptora y la injertada. La planta injertada se suelda con la otra y reinicia su crecimiento, pudiendo desarrollar un nuevo ramaje, hojas e incluso órganos reproductivos. Esta técnica se utiliza sobre todo en el cultivo de árboles frutales y de plantas ornamentales, pues permite utilizar plantas ya establecidas, resistentes a condiciones desfavorables y enfermedades, como receptoras de injertos de plantas más productivas y con frutos de mejor calidad y mayor producción. Una de las industrias que recurren con mayor frecuencia a esta técnica es la vitivinicultura o cultivo de la vid, especialmente para mejorar la producción de viñedos antiguos; en estos casos, las vides antiguas productoras de uvas de baja calidad, pero muy resistentes a la sequía y a las enfermedades, son injertadas con segmentos de vides de alta producción y calidad. |
Injerto ("Innesto". Baixo a licenza CC BY 2.5 a través de Wikimedia Commons). |
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