2.1. La Asamblea Nacional y Constituyente (1789-1791)
El 9 de julio la Asamblea Nacional quedó constituida en Constituyente. El rey Luis XVI comenzó a reunir su ejército en las afueras de Paris para disolver a la muchedumbre que protestaba airadamente por la continua subida de precios y para presionar a la Asamblea, que pedía reformas profundas. Entonces, los campesinos, artesanos y burgueses de París se sublevaron el 14 de julio, asaltaron los depósitos de armas de la Bastilla, prisión del Estado y símbolo de la arbitrariedad real, y la tomaron. Desde París la Revolución se extendió por toda Francia. Ante estos hechos, el 4 de agosto, la Asamblea declaró la abolición del feudalismo y proclamó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano. En 1790 la Asamblea Constituyente aprobó la Constitución civil del clero con la que ponía fin a los privilegios del estamento clerical. Una parte de ellos se negó a jurar fidelidad a la Constitución creándose un conflicto entre la Iglesia y el Estado. La Asamblea Constituyente también estableció el liberalismo económico y acabó con los privilegios de gremios y empresarios; abolió las aduanas interiores para unificar el espacio económico; descentralizó la administración con la creación de los Departamentos franceses y organizó la Guardia Nacional para mantener el orden público. |
Fuente: José Antón Hernández |
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