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A. Dominio procariotas

Engloba a organismos cuya única molécula de ADN es circular y no está asociada a proteínas ni rodeada por una cubierta nuclear. Incluye únicamente un reino:

1. Reino de los moneras

Comprende a las bacterias, generalmente unicelulares, aunque en ocasiones forman colonias o filamentos sencillos. Suelen estar rodeadas por una pared celular con peptidoglucanos (polímeros de azúcar entrelazados con proteínas) y algunos presentan, además, una cápsula externa formada por polisacáridos y proteínas. En su citoplasma no encontramos orgánulos, salvo ribosomas.

Algunas son inmóviles y otras se desplazan deslizándose o por movimiento rotatorio de los flagelos compuestos por la proteína flagelina. Viven en todos los ambientes imaginables y sus procesos metabólicos son extraordinariamente variados. En el sistema de Margulis este reino abarca dos subreinos:

Arqueobacterias
Se caracterizan porque no poseen paredes celulares con peptidoglucanos, tienen lípidos de membrana diferentes tanto de las bacterias como de los eucariotas y presentan secuencias únicas en la unidad pequeña del ARNr.

Estos procariotas se encuentran restringidos hoy en día a hábitats marginales, tales como fuentes termales, depósitos profundos de petróleo caliente, fumarolas marinas, lagos salinos (incluso en el mar Muerto)… Por habitar estos ambientes “extremos”, se les conoce también con el nombre de extremófilos (ver figura); el nombre de arqueobacterias hace referencia a que se consideraba que las citadas condiciones de crecimiento semejaban las existentes en los primeros tiempos de la historia de la Tierra (arkhē significa, en griego, “primitivo”). Estos organismos exhiben atributos bioquímicos que le permiten adaptarse a esos ambientes extremos. De esta manera, existen bacterias metanógenas que producen metano, bacterias halófilas extremas que viven en regiones con gran concentración de sales, bacterias termófilas que viven a temperaturas muy altas…

 
Eubacterias
Suelen estar rodeadas por una pared celular que contiene peptidoglucanos. La mayor parte de las bacterias del suelo, el agua y el aire, así como las que se encuentran en el tracto digestivo de los animales, son eubacterias, las cuales producen también muchos de los antibióticos utilizados en medicina.

Son capaces de vivir tanto en ambientes aerobios (que contienen oxígeno) como anóxicos o anaerobios (que carecen de oxígeno). Algunas eubacterias contienen pigmentos que les permiten usar la luz como fuente de energía (como ocurre en las plantas verdes), otras dependen de compuestos orgánicos y un tercer grupo incluso puede usar compuestos químicos inorgánicos como combustible para realizar los procesos celulares. Los filos más representativos y sus características se explican en esta figura.

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