La primera guerra médica. La batalla de Maratón.
Darío preparó una gran expedición (verano de 490 a. C.), bajo el mando de Datis con el pretexto de castigar a Atenas y a Eretria por la ayuda prestada a los jonios. Una flota de seiscientas naves de guerra, comandada por Artafernes, puso rumbo a Eretria y Atenas. Los persas desembarcaron en la isla de Eubea, tomaron la ciudad de Eretria, arrasaron sus templos y deportaron su población al interior del imperio.
Los persas se dirigieron a la llanura de Maratón. Atenas pidió ayuda a los Espartanos, que llegaron tarde, y sólo pudo contar con la ayuda de Platea. Por consejo de Milcíades, los atenienses salieron al encuentro de los persas en Maratón. Entablaron batalla y los persas fueron derrotados, perdiendo unos seis mil hombres en el combate. La moral de los atenienses era muy superior a la de los persas, porque luchaban por su libertad y la de sus familiares.
Dentro del imperio persa se produjo una gran conmoción. Se sublevaron Egipto y Babilonia.